Con un profundo estudio de la física y la delicadeza material, Plusminus evoca la fluidez y el flujo de la luz. Más allá de las tradicionales bombillas de filamento y las lámparas LED convencionales, la colección de Diez Office aspira a delinear el futuro del diseño de iluminación al hacer que la luz sea maleable y táctil, segura de sostener en tus manos y capaz de reorganizarse para adaptarse a las diferentes necesidades; con una sencilla cinta textil, aunque solo en apariencia.
Todo empezó en 2018 con un briefing del CEO de Vibia Pere Llonch, buscando un concepto basado en conectar el positivo y el negativo. Con esta idea en mente, que poco a poco fue tomando forma, el reto de Stefan Diez era alimentar una lámpara y prescindir del cableado convencional.
“Entiendo mi trabajo como el de un mago. Se trata de fascinar haciendo que las cosas desaparezcan, o haciendo que lo imposible parezca fácil. No me gusta cuando algo parece haber implicado demasiado esfuerzo”
Rompiendo con muchos de los principios cardinales del diseño de iluminación, el sistema que propone este estudio basado en Múnich quería crear una lámpara que llevara el flujo de la electricidad consigo por el espacio, conduciéndolo a lo largo de cintas textiles tensadas en conjuntos geométricos precisos, o bien dejarlo caer en bucles arremolinados cuyos arcos estarían prescritos por la física básica.
“Me gusta utilizar la gravedad como una fuerza y el material como una contrafuerza. El diálogo entre ambas suele darte formas bonitas”
Desarrollar el concepto original de Plusminus planteó un segundo reto funcional. La tira tenía que conducir electricidad sin ninguna evidencia de ello y permitir a los usuarios enganchar o desenganchar tantas luminarias como quisieran sin recibir una descarga eléctrica.
Junto con un laboratorio de creación de prototipos textiles con sede en Berlín, construimos diferentes patrones de tejido, superponiendo hilos de manera que los filamentos conductores pasaran desapercibidos en una correa notablemente uniforme.
Colocando la diversión en el centro como si fuera un juego para niños, así como una demostración innovadora de versatilidad, Plusminus “es un conjunto de herramientas que puedes usar para resolver muchos problemas diferentes, por lo que no hay una promesa inmediata de éxito. Tienes que demostrarlo”, señala Díez.
